BEREA.- Hora y media lleva caminando Maureen Miczak de puerta en puerta por Berea, en Ohio. Finalmente alguien le abre la puerta. Una joven con cara de dormida. "Contamos con que usted irá a votar el martes", dice alegre. "Lo haré", es la corta respuesta. "¿Cuándo exactamente?", pregunta. "Al mediodía". Así acaba la conversación. Miczak le da un folleto sobre Obama a la electora y hace dos cruces en la lista de 50 personas , en las casillas "ED" (día de elección) y "NO" (mediodía). La joven recibirá así una llamada el martes y le preguntarán si ya ha votado. Miczak gira y se va con Patricia Zawadzki. Juntas recorren Berea, ciudad empobrecida, al sur de Cleveland. Según un censo, una de cada seis personas vive por debajo del umbral de la pobreza. Por ello fue tan importante la ayuda de Obama al sector del automóvil, opina Zawadzki. "Es importante seguir apoyándolo", dice. "Paso seis horas en un centro telefónico en la semana y los sábados y domingos hago turnos de dos horas puerta a puerta", revela la profesora retirada. "Estoy loca por la política", agrega riéndose. Las dos mujeres no son las únicas "locas": hay miles de tándems como el de ellas en todo EEUU para animar a los electores a que vayan a las urnas.
El trabajo de "las locas"
Por Christian Fahrenbach, columnista de DPA.